Custodio Blanco
bordado a mano sobre pvc cristal / 2016 - 2017
Custodio Blanco
Bordado a mano con hilos de algodón sobre pvc cristal.
Medidas : 290 x 60 cm.
Montaje: 3 caballetes de aluminio y tabla negra de madera de 2,90 x 70 cm.
Fecha de realización: 2016/17
Custodio Blanco es un bordado de gran tamaño, grande para mí en relación a lo que venía desarrollando con anterioridad. Lo inicio en la Temporada 12 de la Residencia para artistas Curadora, situada en San José del Rincón, un paraje semi-rural situado cerca de la ciudad de Santa Fe. Fueron 12 días de residencia y 11 días de lluvia constante. El terraplén construido por las personas del barrio para contener al río que avanzaba inundando casas y calles, fue mi obseción. Todos los días, o aquellos que podía, caminaba hacia ese lugar para inclinarme y calcar los pliegues formados por la superposición de las bolsas de arena. Luego, volvía al taller y comenzaba a llenar los esqueletos lineales con trazos de hilos de algodón. A partir de abril de 2016 hasta junio de 2017, este bordado fue mutando, hasta alejarse completamente del referente inicial. Si bien conserva los tonos pardos del entorno costero, y formas orgánicas que emergen de planos abstractos, mi acción de bordar e incorporar puntos diferentes, formas orgánicas, fue transformando este terraplén en una nueva realidad, así como la naturaleza fue incorporando esa muralla blanca, al paisaje tradicional del barrio Rinconero.
"Hoy Daniela Arnaudo se dedica a la producción de una especie de diario íntimo construido con delay deteniéndose en formas de su entorno que funcionan como moldes tridimensionales que luego traduce a dos dimensiones.
Afectos, contingencias o simples presencias que sintonizan con su mirada cotidiana son susceptibles de “copiarse” y de devenir en moldes de “algo” de sus días, registrando formas en un tiempo casi detenido.
A través de un dibujo inicial registra revelaciones, apariciones de la vida ordinaria que se manifiestan como una epifanía que debe interpretarse en su propia construcción. Y así queda, entonces, planteada la ardua labor por venir de ocupar los espacios delimitados y el tiempo disponible. Líneas en diferentes direcciones se suceden, alternan, crecen o disminuyen sin que podamos otorgarle un nombre al ritmo. No es un punto de bordado reconocible, es una cadencia, es una manera de ser y estar habitando el espacio en cada plano que se sucede. Y en ese andar recurrente de puntos y líneas se va dejando atrás la referencia que dio inicio al viaje. Las pieles dejan de ser pieles, las telas dejan de ser tales, donde hubo un terraplén sólo queda recordarlo y la primacía de las formas primeras se desvanece en el intento de esconder lo que se evoca." Escribe Cintia Clara Romero, curadora de La hora detenida [CCC Asunción, Paraguay, 2017].
Espuesta en:
- La hora detenida. Centro Cultural City Bank. Asunción, Paraguay. 2017
- La hora detenida. Museo Casa Colorada. Santiago, Chile. 2018
- La hora detenida. Sala Lidaura Chapitel. San Martín de los Andes, Neuquén. Argentina. 2018
La obra se encuentra en el patrimonio de Coleccionista Privado.